Restauración vespa 50.
Es mi primera restauración así que no esperéis mucho.
Esta feliz historia empezó, comentándole a un amigo que estaba aprendiendo a pintar.
Fue en el grado superior de automoción, mis fantásticos profesores nos animaban a pintar cada vehículo que pudiéramos para aumentar experiencia.
Cuando la acabe mi amigo me presto la vespa para ir a las practicas en empresa y poco a poco fui cogiendole cariño a dicha moto.
Al devolver la moto un pequeño hueco quedo en mi garaje.
Hueco que voy a llenar dentro de poco con una vespa 200 iris!!!